Los reductores adaptan el motor a la carga, ya sea la velocidad, el par o la fuerza. La combinación de motor y reductor proporcionará una mayor eficiencia y será una solución más económica. ¿Qué son los reductores?
Los reductores siempre se han considerado componentes esenciales en el mundo de la mecánica, y su éxito radica en su utilidad.
En definitiva, los reductores son transmisiones mecánicas de engranajes que manejan el movimiento de un motor a la máquina a la que se aplican, reduciendo la velocidad para adaptarla a las necesidades de funcionamiento.
Al mismo tiempo que reduce la velocidad, el reductor multiplica la fuerza suministrada, definida técnicamente como par.
El ejemplo más común es el del cambio de una bicicleta: el ciclista puede utilizar la misma fuerza en un terreno llano o en un puerto alpino.
El hecho de que sea fácil hacer funcionar grandes máquinas, vehículos, etc., utilizando pequeños motores, hace que los reductores sean la forma más racional, fiable y económica de transmitir la potencia. ¿Cómo funcionan los reductores?
En un extremo, se aplica un motor eléctrico o hidráulico, mientras que en el otro extremo del eje, la energía se convierte en una fuerza de baja velocidad (par).
En el interior de este cuerpo fabricado con materiales de alta resistencia se transforman enormes fuerzas: piensa en el funcionamiento del timón de un crucero al maniobrar, o en una grúa de contenedores o en la maquinaria para excavar un túnel subterráneo. ¿Cómo elegir los reductores que necesitas?
Antes de comprar un reductor, es importante que tengas en cuenta varios factores.
Un reductor permite adaptar las características (par y velocidad) del eje de entrada y salida de un mecanismo. Por ello, es importante conocer el par y la velocidad.
Por lo tanto, primero debes preguntarte por el par de torsión. Un reductor permite aumentar el par de su motor y, por tanto, permite que una pieza receptora gire bajo el efecto de un nuevo par.
Los fabricantes de reductores especifican a veces el par mínimo y máximo (expresado en Nm) que puede soportar cada uno de sus productos.
La densidad de par varía según los reductores. Por ejemplo, los reductores planetarios tienen una alta densidad de par.
Dado que la otra función de un reductor es reducir la velocidad de un motor, te recomendamos que tengas en cuenta la relación de transmisión ideal para tu aplicación.
La relación de reducción se basa en la velocidad de su motor y se utiliza para determinar la velocidad de salida. Esto también lo indican los fabricantes en las fichas de los productos. Se expresa en revoluciones por minuto.
Por último, hay que tener en cuenta el tipo de montaje de la caja de cambios. Los ejes de entrada y salida de su reductor pueden ser coaxiales, paralelos u ortogonales. Esto dependerá de su aplicación.